REPORTAJE
El juego ET el Extraterrestre está considerado como el
peor videojuego de la historia. Nosotros no estamos del todo de acuerdo, más
bien debería decirse que es uno de los peores videojuegos de la historia. Tened
en cuenta que la lista de juegos nefasto es más amplia de lo que uno cree. Lo
que ocurre es que este en cuestión tuvo una repercusión conocida mundialmente,
usó una gran marca, como es el simpático ET, y el fiasco del producto causó la
caída de la multinacional Atari,..¿caída? Sí. La empresa Atari, que por
aquellos años era la dominadora absoluta de la industria del videojuego, no
pudo soportar el inmenso agujero económico que le causó este videojuego; ET, el
Extraterrestre. Para entender mejor lo sucedido debemos viajar en el tiempo y
ponernos en situación.
Nos montamos en el De Lorian y viajamos hasta 1982. Vemos
que la empresa Atari es la más grande en cuanto a software, hardware y
tecnología informática. Trabaja con ordenadores, equipos y dispositivos también
para el ocio digital. Nadie le hace sombra. Por aquel entonces Microsoft aún
iba en pañales y Apple tres cuartos de
lo mismo. Ese mismo año se estrenaría en las salas de cines una película que causaría
furor; ET el Extraterrestre de Steven Spielberg. La película arrasó en
taquilla. Consiguió llegar a los corazones de todos los espectadores la
conmovedora historia de un bebé extraterrestre perdido en la tierra con cara de pena y un niño humano que se hace amigo de él.
Atari vio en la película la posibilidad de hacer un fortuna comprando los derechos de imagen y creando un videojuego sobre el film de Spielberg. Craso error |
A la compañía Atari le faltó tiempo en coger el teléfono y llamar a las
oficinas de Universal Pictures interesándose por los derechos de imagen del
pequeño extraterrestre. Su intención no era otra que usar la imagen y la
historia del extraterrestre para crear un videojuego. Atari pensó que, dado el
tremendo éxito de la película, ocurriría lo mismo con su juego.
Atari se ofreció a usar la imagen de ET para crear un videojuego para su consola Atari 2600 aunque primero debía comprar los derechos. Desembolsó 25
millones de dólares de una tacada. Era muchísima pasta. Por aquel entonces era una cifra de dinero que
causaba estupor. Universal Pictures ni se molestó en preguntar qué era lo que
querían hacer. Cogió el dinero y cedió todos los derechos del film a Atari. Así que se pusieron manos a la obra. La
compañía quería completar la producción del juego antes de las navidades de
1982 para aprovechar el tirón de la película. Lanzar el juego en fechas navideñas
suponía completar la programación en solo 3 meses, una locura.
Juego ET en una sala de exposición retro |
Ya empezaron los
primeros avisos de empleados de la multinacional que decían que no podrían
cumplir con el plazo. La programación de un videojuego por aquel entonces se
requería de más tiempo porque no había informáticos suficientes. A la compañía
le daba igual, no atendía a razones; debía hacerse antes de las navidades del mismo año para
aprovechar el furor de la película. Como algunos programadores desecharon la
oferta por no tener un margen más amplio, Atari cogió a los que tuvo
más cerca y los motivó prometiendo una orgía de dinero si programaban el juego
ET el Extraterrestre antes de las navidades, o sea, en sólo 3 meses. Toda la
responsabilidad recayó en Howard Scott Warshaw, un joven programador que se
fundió a horas de trabajo él y su equipo mientras la compañía empezaba a dar publicidad al
producto en los medios. La publicidad machacona funcionó y Atari empezaba a
recibir sus primeras reservas antes incluso de que el juego estuviera terminado.
Howard Scott echaba muchísimas horas para llevar a cabo el plazo, también por
las noches. Algunos empleados de las oficinas de Atari veían a Howard andando absorbido del cansancio. Era normal, pues la presión era enorme y él mismo se
empezaba a dar cuenta de que era casi imposible culminar la obra en tan poco
tiempo. Después de muchos esfuerzos y noches sin dormir, después de muchas horas de trabajo, el juego se consiguió
terminar sin pasar un test de errores. Fue presentado al mismísimo Steven Spielberg, el director de la película,
el cual mostró su descontento con el juego. Spielberg comentó que él esperaba
una especie de Pac-Man o come-cocos, algo más accesible y vistoso, no esos
gráficos truñidos con una jugabilidad infumable. El juego se basaba en guiar a
ET por una serie de fases donde debe recolectar piezas de un teléfono para
poder llamar a su casa mientras esquiva a sus perseguidores, unos agentes del
FBI. El juego está tan mal apuntalado que el pequeño ET cambia de fases sin
motivo alguno o cae por fosos sin que nos hayamos movido apenas; todo está lleno de bugs. El juego presenta una bola
de errores en su línea de programación que lo convierte en un truño mayúsculo.
"Le pregunté a Steve (vicepresidente de márketing de Atari): ¿cuánto tiempo tenemos para producirlo? Me dijo que tenía que estar listo para navidades. Me llamó en julio ¡en julio! Respondí: Steve, el tiempo de elaboración para un videojuego es de 6 meses, entre recibir los pedidos de semiconductores, programadores y todo eso. Es imposible. Él me dijo: pues tenéis que hacerlo. Le he prometido a Spielberg que estaría a la venta en Navidad."
Ray Kassar (director de Atari).-
El juego estaba tan mal programado que no se podía ni jugar. Presentaba múltiples fallos (bugs) y sus gráficos eran nefastos |
Las
prisas por programarlo hicieron que el juego estuviera plagado de errores. La falta de tiempo hizo que no pasara un test de prueba que
corrigiera esos fallos. Como pensaban que el juego tendría mucha demanda, se
plancharon millones de copias. Atari lanzó el juego tal cual y le empezaron a
llegar las primeras críticas. Los usuarios se quejaban de que el juego era
infumable y de que no se podía ni jugar. Algunos incluso llegaron a presentar
una demanda contra Atari acusándola de estafa. No era para menos, pues la
gente abonaba un dinero a cambio de un producto estropeado desde el punto de
vista informático. La compañía recibió las primeras devoluciones mientras otros miles cancelaban sus reservas. Ya nadie quería el juego. Atari vio cómo millones de
copias del juego se almacenaban en su stock sin poder colocarse. Empezaba a ser
un problema el espacio para guardar los cartuchos de ET que no se conseguían
vender. No se les ocurrió otra idea que llevar millones de copias del juego a
algún lugar del desierto de Nuevo México y enterrarlas allí.
Este hecho no se
sabía si era del todo cierto y llegó a ser una leyenda urbana ya que Atari
nunca hizo pública esta decisión. Pues bien, en Abril de 2014 una serie se
infelices decidieron comprobar si esto era verdad o no. Se fueron al desierto donde supuestamente
habían sido enterrados los cartuchos y se pusieron a excavar. El resultado:
millones de copias de ET salieron a la luz, fin de la leyenda. La historia era
cierta. Atari había enterrado allí sus vergüenzas. Millones de cartuchos de la
Atari 2600 desenterrados 30 años más tarde. El documental Atari; Game Over
detalla minuciosamente este hecho. El juego ET el Extraterrestre tiene el
premio popular de ser el peor videojuego de la historia por ser el responsable
de la bancarrota de Atari. La compañía tuvo que dejarse absorber por otras corporaciones en 1984, dos
años más tarde del lanzamiento de ET porque no pudo aguantar
más el enorme agujero financiero que dejó la creación del juego. Atari nunca volvería a ser la misma.
Imagen del documental Atari; Game Over |
La culpa no se
la podemos echar a su programador Howard Scott, en absoluto, la culpa del desplome de Atari fue una cadena de errores en la gestión de su directiva sobre el
producto ET. La avaricia y su afán por ganar dinero creyendo falsamente que el juego sería
un éxito fue lo que la desplomó. Las millones de copias sin vender, el desembolso en la compra de los derechos de la película, las prisas por programarlo rápido y mal, etc. Dinero que nunca se recuperaría y endeudó la empresa hasta obligarla a venderse por partes perdiendo así su status. Un fracaso sin precedentes. Pero visto desde otro ángulo, el juego quedará marcado para siempre en la historia de esta industria.
"Cometer errores es humano, pero para estropear realmente las cosas necesitas un ordenador"Paul Ehrlich- Bacteriólogo alemán