LIFE IS STRANGE: BEFORE THE STORM


LIFE IS STRANGE: BEFORE THE STORM (PS4,Xbox One, PC)... Square Enix no quería quedarse sin su secuela del exitoso Life is Strange. Ordenó hacer un prólogo para pulir aún más al personaje Chloe Price, la carismática chica rebelde con tatuajes y pelo azulado del primer juego. En esta ocasión, contrató los servicios de la compañía estadounidense Deck Nine, la desarrolladora del título, prescindiendo de Dontnot Entertainment, la creadora del primer Life is Strange. Esta precuela trata de cómo la joven Chloe Price conoce a Rachel Amber. ¿Y quién demonios es Rachel Amber? Pues es la joven que desaparece misteriosamente del poblado de Arcadia Bay, y de la que todo el mundo habla en el primer Life is Strange. Primero de todo, el lector debe entender que el juego Before the Storm es una novela gráfica, un paseo interactivo que no requiere de ninguna habilidad especial. Se compone de puzzles sencillos, resolver situaciones y, sobre todo, tomar decisiones que en teoría afectan al desenlace. Este Before the Storm ha sido criticado por esto último: las decisiones apenas influyen en el final de la aventura.
      Carece de dificultad alguna y los enigmas son tan simples que podría solucionarlos un mono pulsando el mismo botón repetidas veces. Suena así de triste. El apartado gráfico no mueve nada del otro mundo pero, si nos centramos en la historia, aquí es donde encontramos la verdadera sustancia del juego. Advertimos que vamos a spoilear el argumento a partir de aquí, así que atentos.


      Chloe Price es una joven en plena adolescencia que ha perdido recientemente a su padre en un accidente de tráfico. Chloe trata de superar el trauma fumándose unos canutos como flautas aunque aparezca un póster en la habitación de la protagonista advirtiendo que "fumar es malo". Los programadores han querido dejarlo bien claro. La vida de Chloe es deprimente. No se lleva con su madre y menos aún con el novio de ésta al que ve como un intento de suplantar a su difunto padre. Todo le resulta mal.
        La chica se convierte en una desidias de cuidao hasta que un día conoce a Rachel Amber después de coincidir con ella en un concierto. Al día siguiente coinciden otra vez en el instituto Blackwell donde ambas cursan estudios. Chloe y Rachel se hacen amigas y deciden saltarse las clases, como buenas adolescentes, e irse al monte a fumar. A partir de aquí, la historia empieza a dar unos giros muy raros rizando el rizo y liando la cabeza al jugador hasta perder el hilo. Se inicia una escena de diálogo-discusión-bronca entre Rachel y Chloe en un mirador. El jugador se encuentra, de bote pronto, que debe tratar de apaciguar el fuerte carácter de Rachel mediante decisiones cronometradas con un reloj de arena. Hormonas disparadas por todos lados teniendo que ser esquivadas. Un bonus ideal para el que juega a videojuegos para relajarse.
Chloe (en segundo plano) y Rachel. Ambas son jóvenes adolescentes con problemas familiares e inquietudes. Encuentran su unión en el apoyo mutuo.

      Después de conseguir calmar a la muchacha, pase lo que pase y sin importar las respuestas que hayamos tomado, Rachel monta en cólera y prende fuego a una papelera provocando un incendio forestal en pleno monte. Uno puede pensar que nada más empezar la aventura ya la ha liado parda pero tranquilos: la culpa no es vuestra, es de su padre. Rachel lo ha pillado besándose con otra poniendo los aparatos a su madre. Más tarde, Rachel Amber descubre que su madre no es su madre, y que su madre biológica es realmente otra, concretamente con la que ha pillado a su padre besándose, que a su vez es yonqui. Y para impresionar más, el padre de Rachel es el Fiscal del Distrito. Dirige la lucha contra el narcotráfico en Arcadia Bay. Un Fiscal que lucha contra el narcotráfico enamorado de una drogodependiente. Con este panorama uno no se sorprende de que la joven se fume canutos uno tras otro.
       Nos gustaría desenroscar un poco más la historia pero lo que viene a continuación es aún más barato, mostrando una falta de originalidad que tampoco merece la pena desvelar. En realidad, el grueso de la aventura está en las experiencias vividas conjuntamente entre Rachel y Chloe, que las hace más fuertes. Prospera una relación romántica entre ellas, o sea, un amor lésbico. Una de las mejores escenas del juego, que también es la más cómica, es cuando Rachel y Chloe actúan en una obra teatral del instituto Blackwell. Rachel, en un momento dado, cuando está interactuando con Chloe cambia el guion predefinido de la obra y le confiesa que la ama, delante de todo el público. Chloe lo flipa un poco, como es lógico, además de estar influenciada por el canuto que se ha fumado poco antes de salir a escena.

      La historia es bonita pero peca por ser demasiado predecible y ñoña. Además, el colofón es casi el mismo. Da igual qué camino hayamos elegido en la aventura o qué decisiones tomemos ─casi siempre a elegir entre dos posibles─ el final es casi el mismo. A penas hay diferencia entre uno y otro. En Before the Storm tampoco hay poderes, a diferencia del primer Life is Strange, que le daba un toque interesante. Podíamos deshacer situaciones volviendo atrás en el tiempo pero aquí no. La conclusión es que Before the Storm es un buen juego, o aventura gráfica, pero tiene una acusada falta de libertad en el jugador. Las decisiones apenas cuentan. Nos toman por meros espectadores que deambulan por el mundo de Life is Strange. Sí que sirve de estudio sociológico, valiosísimo por cierto, para la compañía Square Enix y conocer los gustos de sus jugadores. Al final de cada capítulo ─tres en total más uno extra─ aparece el porcentaje de decisiones tomadas por todos los jugadores del mundo. Por ejemplo, mientras se escriben estas líneas, el 65% de los jugadores ─a nivel mundial─ le pidió un beso a Rachel. No nos entra en juicio por qué el restante 35% no le pediría lo mismo. Las decisiones tomadas en esta y otras situaciones son dispares en todo el mundo. Casi todo el mundo coincide en que el primer Life is Strange (2015) es mejor en todos los aspectos que este Before the Storm. Una oportunidad perdida para contentar a los fans.
Bonus Chapter

      Para los que decidan comprar la edición especial, o Deluxe, de Before the Storm adquieren un capítulo extra: Farewell, o Despedida. Advertimos que solo si eres un súper fan de la muerte de la saga te hagas con él. El capítulo aporta muy poco. Es, básicamente, la relación de amistad entre Chloe y Max (la protagonista del primer Life is Strange). Nada en contra de contar la amistad entre las dos jóvenes pero jugarlo es soporífero. esta vez llevamos a Max Caulfield cuando tenía 13 años. Max y Chloe interactúan y charlan en un ambiente distendido, en casa de Chloe. Juegan a los piratas. Sí, has leído bien: a los piratas. Solo al final, cuando Max se despide de Chloe porque se muda a Seattle, despierta el interés en el jugador ya que se observa la evolución de Chloe. En este capítulo, Chloe recibe la traumática noticia de que su padre ha fallecido en un accidente, y Max se marcha a Seattle dejando a Chloe en pena el mismo día del funeral. Ambas inician un camino por separado que tendrá su punto de unión, su reencuentro, en Life is Strange.


Calificación: Aceptable