ZELDA SKYWARD SWORD


ZELDA Skyward Sword (Wii)… la vida de Wii sólo permitió sacar dos entregas de Zelda. Miyamoto y su equipo querían dedicarle una traca final a la consola antes de que apareciera Wii-U, su sucesora. Habían pensado en sacar Zelda Skyward Sword para la nueva futura consola con pad de ladrillo pero eran muy conscientes de que los fans iban a enojarse bien como lo hicieron en su día con la antigua Game Cube y su Zelda Twilight Princess de Wii (se anunció que saldría para Game Cube pero salieron contadas copias). Por eso desecharon esta opción afortunadamente.


     Miyamoto entendió que era prioritario satisfacer la petición de los fans de Zelda antes que crear un juego vende-consolas en el lanzamiento de la nueva Wii-U para promocionarla.

    Lo cierto es que la compañía Nintendo respetó la decisión del director de programación de Zelda, por muy raro que parezca, pero a regañadientes. Los directivos de la empresa de Kioto siempre buscaron ganar el máximo dinero posible y vieron mucho más rentable el lanzaminto de Z.Skyward Sword para Wii-U que para Wii. Además, la consola de Wii estaba cerca de su final de vida y el aparato presentaba numerosos ataques piratas, mucha gente la tenía hackeada, con lo que las estadísticas mostraban que el juego del nuevo Zelda iba a ser pirateado sin contemplaciones, aún más en tiempos de crisis. Wii ha sido la consola de la pasada generación más hackeada. Algunos usuarios piratas consiguieron reventarla por completo consiguiendo poder hacer lo que quisieran con ella, desde introducir juegos no originales a instalar programas, llenarla de películas, archivos corruptos, etc.
" La Dirección de Nintendo quería Zelda Skyward Sword para la nueva Wii-U, no para Wii, ya que la piratería influiría en sus ventas. Miyamoto se negó en rotundo."

     La voluntad de Miyamoto era que este Zelda fuera para Wii y la compañía no quiso pelearse con el que a día de hoy sigue siendo su empleado estrella. Finalmente, los usuarios de Wii pudimos disfrutar de este juego y se nos desvelaría, por fin, el origen de la Trifuerza (poder, sabiduría y valor) y la Espada Maestra.


La princesa Zelda

    El juego es sublime. Es un Zelda de toda la vida pero tenemos que reconocer que la innovación japonesa empieza a presentar un cierto desgaste como ya publicó la web americana Gamespot sobre este juego, aunque la revista japonesa Famitsu le dio un 40/40 en su análisis. Es bien sabido por todos que los japoneses son muy suyos y son capaces de votar positivamente todo lo que sea made in japan. Zelda Skyward Sword nos habla de la vida de Link el cual vive en una aldea flotante llamada Neburia. Link es miembro de una Academia de Caballeros y al comienzo de la aventura nuestro héroe se encuentra en etapa de formación. Pero su curso académico se verá interrumpido por la desaparición de su amiga Zelda mientras realizaba un vuelo con su pelícaro, una pajarraco que usan los habitantes de Neburia para viajar por los cielos. El accidente hace que la chica, Zelda, caiga a las Tierras Inferiores y Link se lance al rescate a por ella, cómo no. En su búsqueda descubre a Grahim, Señor del Mal, el cual ha sido el responsable del accidente de Zelda y pretende secuestrarla para abrirla en canal a modo de sacrificio y así poder despertar al Heraldo de la Muerte, nuestro enemigo final, un tipo muy ciclado que levanta pesas con su enorme espadón, pelo a modo de fuego engominado y cara de bellísima persona. El Heraldo de la Muerte es una reencarnación de Ganondorf, por así decirlo. Las aventuras de Zelda siempre giran en torno a los mismos personajes que renacen una y otra vez en diferentes líneas temporales. Grahim es un aprendiz, un sirviente, un pelele de Ganondorf.



    La mecánica de la aventura se repite como en los anteriores Zeldas. Vamos de mazmorra en mazmorra. Misiones que tratan de encontrar 3 fragmentos diferentes hasta completar una pieza, hablar con habitantes de diferentes mundos, ir de comarca en comarca, ir de compras, hablar con Fay nuestra protectora, buscar tesoros, ir de compras, ir de mazmorra en mazmorra, buscar fragmentos, hablar con Fay nuestra protectora…El juego peca de repetirse un poco pero la gracia de este Zelda es que es un mundo tan mágico y dispar que atrae y engancha, invitando al jugador a explorar más y más, a parte de que está lleno de mensajes morales que nos muestran un poco el principio ético de sus programadores. Ayudar a ciertos NPC's (non player character) de la aventura hará que potenciemos nuestra experiencia y seremos recompensados. También nos enseñan que debemos pensar y usar la cabeza para seguir avanzando en nuestra aventura, no todo es repartir golpes como un pandillero. El juego es bueno, sin duda, pero sus puntos fuertes de la saga empiezan a flaquear. Los puzzles son cada vez más sencillos a diferencia de los antiguos Zeldas que uno casi se volvía loco.


    Una de las grandes pegas que le vemos al juego es que los enemigos son más flojos que un domingo. Incluso los orcos rojos y gordos de gran fuerza física, equipados con un escudo grande, no son rival para Link y su Espada Maestra. La dificultad de los juegos de Zelda tienen la peculiaridad de que no se pueden configurar, igual que Hideo Kojima (Metal Gear). Estos programadores creen que el jugador no debe elegir la dificultad, la dificultad la elige el editor. Los programadores de este Zelda quisieron romper un poco la tradición en Z.Skyward Sword. Una vez completas el juego, aparece la opción del modo héroe el cual los rivales son más duros, pero claro, ya te has pasado la aventura una vez y uno se sabe todo el camino y los puntos débiles de todos los enemigos, así que la dificultad pierde su gracia.
" La dificultad del juego es irrisoria. Una vez completada la aventura, podemos subirla a dificultad "héroe" pero ya es demasiado tarde: conocemos todos los trucos, puntos débiles de los enemigos y sus mazmorras."

    Al darle tantas vueltas a algunos aspectos del juego como las apariencias, vestimentas de personajes, etc, los programadores no trataron con tanta diligencia el desarrollo de la aventura provocando que, sin darse cuenta y llegados a cierto punto, los jugadores caían en un bug -un error de programación- que conseguía que el jugador ya no pudiera avanzar más en la historia y estuviera atrapado como en una espiral de acontecimientos que se repiten indefinidamente sin posibilidad de progresar. Por si fuera poco, esto ocurría cerca del final de la aventura que a más de uno debía de darse de cabezazos contra la pared al comprobar que la única solución era ¡¡resetear la partida!! y empezar de nuevo!! Todo desde el principio. Una auténtica pifiada que ni hecha a propósito. Los desarrolladores sacaron en tiempo récord un parche para esquivar el bug pero era necesaria una actualización de la consola mediante internet, así que ,los que tenían la partida guardada desde una copia pirata se tuvieron que cortar las venas o volver a empezar la partida. Más de un fan le debió poner dos velas negras a Miyamoto. Enseguida se corrió el rumor por la red de que el bug había sido creado adrede para fastidiar a aquellos que jugaban desde copias no originales de Zelda. Nunca sabremos si era cierto o no pero no suena descabellado.

Este personaje era un enclave para caer en el bug, no hablar con él evitaba el fallo
    Con bug o sin él, la aventura gana profundidad y diversión completando misiones secundarias que nos dan más experiencia de juego y más atributos. Si queréis conseguir buenos tesoros ayudad al demonio Batolo otorgándole gemas de gratitud. Cada vez que le hagáis una visita os dará unos premios realmente jugosos. Es un auténtico primo. Parecerá una broma pero uno de los tesoros más apreciados que tienen los juegos de Zelda son unas sencillas botellas vacías. Pues sí, unas simples botellas vacías te solucionan la vida y no nos referimos a ahogar las penas, nos referimos a que puedes llenarlas de pociones curativas con distintos atributos y van muy bien para llevar a cualquier parte. Son difíciles de conseguir y ya os adelantamos que en esta entrega de Zelda sólo hay 3 botellas. Ninguna se puede comprar con dinero, tenemos que encontrarlas desperdigadas por los diferentes mundos.

Lord Grahim, un fanático del Heraldo de la Muerte
    Los combates de Zelda han mejorado mucho gracias al Wii Remote Plus del mando con el que manejamos nuestra espada como si la estuviéramos empuñando. No basta con dar estacadas al bulto, hay que detectar el punto débil de cada enemigo y ejecutar el golpe con habilidad. No sirve dar palos de ciego. Con eso el juego gana muchísimo aunque cueste creerlo. Link también va equipado con un escudo y la sensación de estar armados con una espada y un escudo es realmente formidable. En el caso de un diestro, manejamos la espada con la mano derecha y con la izquierda sacamos el escudo sacudiendo de un solo golpe el Nunchuk direccional. Y si realizamos este gesto justo en el momento de recibir un golpeharemos una especie de reversal y el enemigo se quedará aturdido unos segundos. 
El director de Zelda, Miyamoto
     
    Como siempre, el final del juego es de esos que casi te hacen llorar, porque es como la despedida del juego de Zelda hasta que se estrene otra entrega. Miyamoto tiene muchos juegos a su espalda y sabe cómo tocar la fibra a sus fans. Uno se preguntará: ¿será este el último Zelda de Miyamoto? ni por asomo.

    Z.Skyward Sword es un buen juego de aventuras, necesario en cualquier estantería de todo videojugón. Su mecánica soporta bien los años y jugar a Zelda se convierte en una experiencia única gracias al Wii Remote. Pero Miyamoto y su equipo tendrán que andar con mucho ojo en su próximo juego porque ya no sorprende tanto como antes. Creemos que una retirada a tiempo siempre es una buena jugada.

POSITIVO

   - la aventura es emocionante y engancha.

- los combates son súper dinámicos y entretenidos, nuestra habilidad contará mucho para ganar.

- los puzzles son muy variados y en algunos tenemos que usar armas diferentes. Los juegos de Zelda nos enseñan que hay que usar la cabeza para jugar y allí es donde radica el gran triunfo de todas sus entregas.

NEGATIVO

   - los juegos de Zelda empiezan a sorprender poco porque algunas de sus mecánicas se repiten: su historia, sus mazmorras, etc.

- los enemigos son demasiado débiles, incluido el final boss. Son patatas y bebida grande.

- El juego se lanzó con un bug, a estas alturas imperdonable. Mucha gente tiró la partida y no la retomó jamás. 


Calificación: Muy Bueno