SILENT HILL HOMECOMING



SILENT HILL HOMECOMING (PS3 y 360)…es un juego de terror que sigue, supuestamente, la línea de la saga del misterioso pueblo. Esta es la primera versión de Silent Hill que más se desvincula de sus antecesores. Es el primer Silent Hill de la generación PS3 y XBOX 360. Los programadores lo diseñaron deprisa y corriendo repartiendo muchos enemigos por todos los mapas. Se olvidaron de vender la denominación de origen de esta saga: el survival horror. Se echa en falta esa sensación de tener que consultar una guía o llamar a un amigo para que te hiciera compañía jugando a Silent Hill. 

    Pasar miedo se pasa, sin duda alguna, pero casi se podría decir que el juego es más un arcade que una aventura de terror porque el protagonista pierde mucho el tiempo repartiendo puñetazos a necromorfos y criaturas salidas del infierno.
Este Silent Hill nos habla de Alex Shepherd, un veterano de guerra más perdido que un pingüino en un desierto de regreso a su casa: un pueblo llamado Shepherd's Glen. Al poner el primer pie en la ciudad, descubre que todo el mundo de su vecindario se ha vuelto medio loco. Basta ver cuando habla con la gente: diálogos absurdos con respuestas cortas y ásperas, incluida su madre que hace que Shepard se quede con cara de póker cada vez que le habla. De su padre….ni rastro. Además, nada más llegar Alex tiene constantes pesadillas en las que sueña con su hermano Joshua, desaparecido en circunstancias extrañas. Trata de decirle cosas desde sus sueños pero que Alex no logra comprender. El objetivo principal de la aventura es descubrir dónde está el hermano de Alex y también descubrir qué ha pasado en el pueblo, cosa que ni el más experimentado detective descubriría......y si lo hiciera, saldría corriendo a cambiar de profesión.

    Las municiones, las dosis de vida, los botiquines....todo escasea. Los creadores del juego pretendieron así subir el nivel de dificultad. eso y llenado de enemigos los mapas. No encontramos apenas ítems de supervivencia que nos ayuden. Sin embargo, nos servimos de armas rudimentarias para ir golpeando seres extraños y abrirnos paso (barras de hierro, cuchillos, etc). Este Silent Hill se convirtió en un arcade de ir aporreando monstruos a diestro y siniestro más que un survival horror. Apenas encontramos armas de fuego pero poco importa, Alex usa sus músculos para buscar a su hermano. De los enemigos, algunos mejor no hablar. Están las famosas enfermeras que con sus siluetas estilizadas y sus flamantes pechos redondos son capaces de quitar el miedo en vez de provocarlo.

El juego trata de darnos terror psicológico, en ocasiones lo consigue
El clima de terror es suave. Apenas consigue incomodarnos
















    Lo más logrado es la atmósfera típica de Silent Hill, especialmente al visitar el inframundo. Es en ese momento cuando el jugador puede sentirse más vulnerable. Como muchos fans sabrán, si el entorno se empieza a oxidar significa que Alex está en el infierno y no se va a encontrar buena compañía. Pillarnos con poca vida o sin armas puede ser sinónimo de ir apagando la consola. Se aprecia un abuso considerable de la presencia de enemigos lo cual da una señal de que los programadores empezaron a ponerlos sin un orden lógico. Muchos en muchas esquinas, lo que desespera un poco llegando a hastiar la experiencia.
El juego es muy arcade, la mayor parte del tiempo estamos liados a puñetazos con monstruos

    Se agradecen los guiños de anteriores entregas como cuando Shepard apaga la linterna que lleva en la solapa evitando así ser detectados por algunos enemigos. El juego tiene varios finales. Los finales dependen de las decisiones que el jugador vaya tomando a lo largo de la aventura. Solo una pista: no seáis malos y salvad a mamá.

Calificación: Bueno