OUTLAST (PC y PS4)… la generación de PS3 y Xbox 360 ha tenido una clara falta de interés en hacer juegos de terror, o al menos, en hacer juegos de terror buenos. La saga Resident Evil y sus momentos de acción a lo James Bond junto con Silent Hill, más lineal que una línea pintada en el suelo, ha dejado en depresión a muchos fans del género survival horror. Pero una compañía con el nombre Red Barrels, que no la conocen ni en su pueblo, ha dado un ejemplo de cómo debe hacerse un juego de miedo. El nombre de Red Barrels no es muy conocido pero sus empleados tienen experiencia en el mundo de los videojuegos.
Tirando de Google, uno descubre que los anónimos programadores de la compañía han estado en proyectos como Splinter Cell o Assassin’s Creed. No van de broma. Muestran su potencial en este videojuego survival horror, Outlast, que consigue trasmitir miedo del bueno, como debe ser.
Usando una sinopsis sencilla pero suficiente, como es la de explorar un psiquiátrico, han conseguido que más de uno tenga que dejar el juego a medias porque no podía avanzar más en la aventura sin tener pesadillas la misma noche. Alguno creerá que somos unos exagerados, pues bien, que accedan a una copia de Outlast y se prepare para sufrir. El juego ha sido merecedor de muchos reconocimientos entre los amantes del género. Sus críticas han sido buenas. Outlast es todo un ejercicio de cómo hacer saltar a un gamer del sillón. Los programadores se han inspirado en los tremendos éxitos cosechados por Slenderman, el hombre alto y delgado que nos aterró en 2012 con un juego en 1º persona en el que debíamos evitar mirarle directamente mientras recolectábamos ocho dibujos esparcidos por el escenarios. A los creadores les gustó la idea de que el protagonista del juego Slender, no podía usar armas ni atacar a nadie. Con una linterna, debía recorrer la pantalla en busca de las dichosas notas mientras vigilaba de no mirar atrás. Este factor es el que plagiaron del juego Slenderman. Un personaje armado con misiles, granadas, ametralladoras.... no transmitirá miedo al usuario por mucho monstruo que se le acerque. Es como hacer una película de terror con Chuck Norris como protagonista.
Eso es lo que pensaron los de Red Barrels. Por eso, el personaje principal de la aventura es un periodista, ni soldado, ni policía, ni exboina verde… un periodista; armado con una carpeta, un lápiz y una cámara para registrar toda la murria que se va a encontrar dentro del psiquiátrico, para que no le falte detalle. No hay combates, todo lo que debemos hacer es huir de nuestros enemigos.
Este intrépido journalist recibe un día una noticia de que en un centro psiquiátrico se están cometiendo atroces experimentos, torturas más bien. Le encomiendan la tarea de ir allí para saber si es verdad, denunciar las malas praxis y, de paso, conseguir una exclusiva amarillista. Para averiguar si es cierto o no, el hombre va de visita a ver el psiquiátrico personalmente, para entrevistar a sus empleados. Nuestro hombre debería cobrar horas extras a precio de oro y un plus de peligrosidad porque desde el minuto uno la muerte le persigue los talones. Miles Upshur, como se hace llamar el valiente periodista, descubre que el hospital psiquiátrico está lleno de pacientes con sed de sangre y no hay ningún enfermero que ponga orden. En casi todas las habitaciones se encuentra cadáveres que son, en su mayoría, la de los empleados del lugar: médicos, auxiliares, vigilantes, doctores, matasanos….todos están muertos. A los cadáveres los han usado para practicar papiroplexia, si no, no se explica tal espectáculo. La ambientación de Outlast enseguida sumerge al jugador en una atmósfera de terror al inundarlo de imágenes viscerales, sangre en las paredes, susurros, puertas que se abren, ruidos, lamentos, gritos...
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| No hay combates. Todo lo que debemos hacer es huir de los enemigos como éste |
El objetivo principal es tan sencillo como que debemos salir del hospital sin pensarlo ni un segundo. Y cuando alguien trate de impedírnoslo, debemos correr sin más. Es un survival horror en estado puro en 1º persona. En los lugares oscuros, Miles usa la visión nocturna de la cámara que lleva para grabar, a la que por cierto, se le acaban las pilas. Para que el cacharro funcione, hay que encontrar más pilas por las estancias del hospital. Os podemos asegurar que el terror está asegurado. Outlast es una llamada de atención a las compañías que abandonaron el género del horror. Con un toque maestro, enseñan lo sencillo que es causar impresión al jugador y contagiarle de la angustia de ser perseguido por una panda de psicóticos asesinos.
Está previsto que salga una versión de Outlas para PS4, o sea, que es un producto obligado para quienes disfruten pasándolo mal. Un detalle, outlast significa literalmente "sobrevivir".
Consejos:
- Outlast es un juego relativamente fácil si se siguen unas pautas. La única dificultad realmente es el miedo a continuar. Sé valiente.
- tu habilidad es importante, debes mantenerte sereno. Aunque te persigan, mantén la calma. Un giro espontáneo de tu visión en 1º persona hará que te pierdas por el hospital.
- a medida que avanzas, trata de recordar los lugares. Es fácil perderte. Toma como referencias pintadas de las paredes o dibujos.
- recuerda usar las taquillas para esconderte de tus enemigos. No obstante, puede que te encuentren si te han visto meterte en ellas.
- cuando estés perdido, mira a tus alrededores. Mira arriba.
